¿Qué es ciencia? (¿Lo que yo hago también?)

 Lo que más me ha llamado la atención de las dos entradas sobre “qué es ciencia” es la insistencia en que la ciencia no es solo un conjunto de conocimientos, sino un método de pensamiento crítico, una forma sistemática de abordar problemas, formular hipótesis y verificar resultados. Este enfoque me parece especialmente interesante cuando se aplica fuera de los campos tradicionalmente considerados como “científicos”, como las ciencias naturales o exactas.

En el caso de mi disciplina —que gira en torno a la arquitectura, el urbanismo o el patrimonio— me parece particularmente valioso repensar la ciencia no solo como una práctica empírica o experimental, sino también como una manera rigurosa de construir conocimiento sobre el entorno construido. Aunque en nuestra área hay componentes técnicos muy claros (estructuras, materiales, eficiencia energética…), también hay otras dimensiones —históricas, sociales, culturales— que a veces parecen más alejadas de la "ciencia" en su sentido más tradicional. Sin embargo, eso no significa que no puedan ser abordadas científicamente.

Por ejemplo, en mi investigación sobre los edificios de viajeros en la línea ferroviaria Zaragoza-Canfranc, se combinan metodologías técnicas como la fotogrametría o el escaneado láser con análisis históricos, documentales y arquitectónicos. En ese sentido, aplicar criterios científicos significa ser sistemático en la recopilación de datos, transparente en los métodos, crítico con las fuentes, y riguroso en el análisis. Puede que no estemos en un laboratorio, pero sí estamos creando conocimiento que debe poder ser comprendido, contrastado y utilizado por otros.

Me resulta muy útil pensar que la ciencia también implica interrogar la realidad con preguntas claras y buscar respuestas con una lógica estructurada. En arquitectura y patrimonio, eso se traduce en preguntas sobre el porqué de una forma, la evolución de un edificio, su valor simbólico o funcional, o la mejor forma de conservarlo. Todo esto puede y debe plantearse con una mentalidad científica, aunque los métodos sean distintos a los de otras disciplinas.